mantenimiento preventivo
Mantenimiento y reparación de maquinaria de hostelería.
El éxito de las empresas de hostelería depende de la seguridad y la eficacia, que a su vez dependen del equipamiento de sus cocinas. Como cualquier máquina bien engrasada, los equipos de las cocinas comerciales necesitan mantenimiento para rendir al máximo.
El mantenimiento de los equipos de hostelería comercial forma parte de cualquier negocio alimentario saludable y sostenible. Mantener su equipo en las mejores condiciones beneficia a sus clientes, empleados y negocio.
Las empresas de hostelería suelen utilizar sus aparatos innumerables veces a lo largo del día. Estas intensas demandas provocan desgaste.
Dejar que los equipos se desgasten reduce su funcionalidad y puede provocar la contaminación de los alimentos o accidentes laborales. El mantenimiento periódico de los equipos de hostelería es una tarea necesaria.
Limpieza e higienización periódicas
Las buenas prácticas de higiene son una prioridad absoluta a la hora de mantener los equipos de hostelería comercial. Una limpieza a fondo minimiza los riesgos para la seguridad alimentaria derivados de los gérmenes y la contaminación cruzada.
Por lo general, todos los utensilios utilizados en la preparación de alimentos deben limpiarse y desinfectarse a diario. También es una buena práctica limpiar semanalmente las superficies exteriores de los aparatos. Esto debe hacerse incluso si el aparato no entra en contacto directo con los alimentos.
Antes de limpiar cualquier aparato, desconecte la alimentación eléctrica. Esta medida de seguridad le ayudará a evitar daños a usted y a la máquina.
Asegúrese de que cualquier producto de limpieza que utilice en sus utensilios de cocina sea apto para alimentos. El mejor limpiador depende del aparato, pero evite utilizar productos químicos agresivos o utensilios de limpieza abrasivos.
Por ejemplo, los disolventes y los limpiadores a base de petróleo contienen productos químicos que pueden dañar las máquinas o contaminar los alimentos. Asegúrese de leer el manual de instrucciones de su aparato para saber qué productos de limpieza son seguros.
Del mismo modo, los utensilios de limpieza duros o afilados pueden raspar el equipo y dejar sustancias inseguras. Evite los estropajos de acero y utilice en su lugar una esponja o un paño suave.
Nunca limpie un aparato de cocina con manguera, inmersión o vapor, ya que todos estos métodos pueden dañar las piezas internas.
Puede utilizar un paño húmedo para limpiar el exterior del aparato, pero evite mojar el enchufe. Podría estropear el sistema eléctrico y provocarle una descarga.
Uso y manipulación correctos
Utilizar correctamente los equipos de hostelería es importante para que sigan funcionando. Los aparatos deben ir acompañados de manuales que proporcionen directrices para un uso seguro, y a menudo se pueden encontrar copias digitales en Internet.
Las precauciones de seguridad deben empezar incluso antes de montar el equipo.
Muchos aparatos de cocina comerciales son pesados y pueden requerir varias personas o equipos eléctricos para su instalación. Sólo debe mover los equipos pesados con ayuda para evitar daños a sí mismo y a la máquina.
Además, tenga en cuenta que los aparatos nuevos suelen venir con cubiertas protectoras y cinta adhesiva. Asegúrese de encontrar y retirar todos los envoltorios antes de utilizar la máquina. Lo último que quiere es plástico cocido.
Puede instalar muchos electrodomésticos simplemente enchufándolos, pero otros pueden requerir conexiones especiales de electricidad, gas o agua.
No intente una instalación compleja usted solo si no se siente seguro. Los proveedores de cocinas de calidad dispondrán de un servicio de atención al cliente que le guiará a lo largo del proceso de instalación.
Consulte siempre el manual para conocer las recomendaciones específicas de mantenimiento de los aparatos de hostelería. Los distintos aparatos tienen necesidades particulares que debe conocer.
Por ejemplo, las placas de inducción son excelentes aparatos de cocina. Sin embargo, sólo funcionan correctamente con baterías de cocina de fondo plano de hierro o acero.
O la freidora, un aparato muy popular en muchas cocinas para preparar platos crujientes. Estas máquinas utilizan aceite de cocina que debe vaciarse y sustituirse periódicamente por motivos de limpieza y seguridad alimentaria.
Mantenimiento preventivo programado
Programar el mantenimiento periódico de su equipo es una buena forma de garantizar su buen funcionamiento. También resulta menos molesto cuando forma parte de una rutina. Estas son algunas de las ventajas de concertar el mantenimiento:
El mantenimiento programado de los equipos de hostelería ayuda a identificar posibles problemas antes de que se conviertan en problemas más graves y costosos. Esto le ahorra dinero y energía a largo plazo.
El mantenimiento preventivo le da la oportunidad de detectar signos de desgaste. Siempre debe incluir en su mantenimiento periódico una limpieza a fondo e inspecciones para detectar posibles daños. Esto garantiza que todas las piezas estén en buen estado.
Ayuda a evitar fugas. El mantenimiento periódico le permite comprobar si hay fugas en las conexiones de agua o gas. Las fugas de agua pueden acumular costes y crear riesgos de resbalones, y las fugas de gas pueden incendiarse y causar daños generalizados.
Detecte cualquier riesgo potencial de incendio antes de que se convierta en un problema. Compruebe que todos los filtros y conductos de ventilación de sus electrodomésticos están libres de acumulaciones. Esto mantiene sus máquinas funcionando eficientemente, pero también es una medida de seguridad. Los filtros de aire y las campanas extractoras son especialmente importantes porque el polvo y la grasa acumulados pueden incendiarse en cocinas calientes.
Cuando se tiene un negocio de hostelería, puede resultar difícil dedicar tiempo al mantenimiento periódico. Sin embargo, es necesario para mantener la salud y la seguridad.